Luz

RSS

G Plus

Facebook

Twitter

Con el nacimiento de Allegra, Indiana tuvo sus momentos de locura, pero nada grave. Ahora, incluso, está en la etapa de pleno idilio: ama a su hermana, la ve y la quiere abrazar, darle besos… Todavía no la lleva a upa, pero sí me pide cargarla cada vez que se sienta. Se golpea las rodillas y me dice: “Acá, papá, ponela acá”.

Imagen anterior
Imagen siguiente
Nuestro hombre: Fabián Cubero
 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.