Por Male Ortíz. Es la nueva incorporación de Pol-ka con su papel de Toro en Argentina, tierra de amor y venganza. Viene de los fenómenos Violetta y Soy Luna. de novio con Cande Molfese, se lanza con todo a su carrera musical. Su primer single solista es furor entre los centennials.

Triplica en seguidores a Paul McCarney y a Mick Jagger. Más de siete millones y medio de followers en Instagram indican que hay que prestar atención a este muchachito italiano –nacido en Cittá Sant’Angelo– de 25 años que incorporó el “che”, el “boludo” y el “entendés” al final de las frases, tanto como las costumbres de tomar mate por la mañana y comer asado para las juntadas con familia o
amigos. Histriónico, de sonrisa franca y supercarismático, adora la fusión latino – europea también para la música, su gran pasión: “Canto y compongo pop latino europeo, aparte es lo que me gusta escuchar“, jura. Y habla de un puente entre culturas o una mezcla que, en algún punto, está representada en toda su persona. Con ustedes, el joven actor y músico italiano que promete hacerse unlugar más allá del corazón de los centennials, hace
rato rendidos a sus pies.
-Surgiste gracias a un programa de talentos en Italia, X Factor, ¿verdad?
-Así es. De chiquito hacía shows todo el tiempo, actuaba, cantaba, bailaba, pero por afuera era muy tímido. Para desbloquear eso, mis padres me mandaron a una escuela de actuación a los 12 años e hice un vuelco al 100 por ciento. Descubrí mi vocación. La música ya la traía. En casa somos fanáticos del Festival de San Remo, que es el festival de la canción italiana, es una semana sagrada para todos. Nos reunimos a seguirlo, y a mi papá siempre le gustó cantar y tocar la guitarra. Lo llevo conmigo desde la cuna, después estudié. Todo lo que sea expresar es casi una necesidad para mí.
-Y luego llegó Violetta…
-Claro. Necesitaban un italiano para la tira del momento y como llegué casi a la final de ese talent show, ahí me vio una productora de Disney Italia. El resto es un sueño del que todavía no despierto. Conocí toda Latinoamérica, Eslovenia, Suecia, Polonia, Alemania,
Gran Bretaña, Francia y Portugal. Y a mi amor, Cande Molfese. Disney fue mi gran escuela, tuve la suerte de ser parte de dos proyectos como Soy Luna y Violetta, aprendí muchísimo y por eso me siento preparado para lo que viene.
-Los italianos son familieros como nosotros y vos hace 7 años que vivís en Argentina y viajás mucho. ¿Extrañás?
-Claro que sí, pero la familia de Cande es como mi familia para mí y eso me ayuda mucho, por supuesto, estamos en contacto permanente. Ellos la adoran y están felices de que vuelva a casa con ella, ahora que estuve en México presentando el single solista Probablemente, decían “qué bueno ya están juntos de nuevo”.
Son románticos y superafectivos como yo. Nos tira el amor y los lazos verdaderos, fuertes, que sostienen, que hay que cuidar tanto, porque si bien soy un agradecido de lo que ocurre conmigo en el universo de lo digital, no olvido que el mundo real es el otro. Soy un cultor del encuentro, lo más importante es la conexión real.
-¿Cómo fue la experiencia con Argentina, Tierra de amor y venganza?
-¡Increíble! Tuve escenas con Fernán Miras, ya lo había ido a ver al teatro, y me pareció un genio, superprofesional, un lujo. Siempre estoy mirando e intento aprender de cada oportunidad. Aparte, luego de que mataron a mi personaje, Toro, él vuelve… Eso quiere decir que mi personaje gustó y me siento muy agradecido al público por eso.
-¿Tenés referentes que admires y que te marquen un rumbo? -Adoro a Leonardo DiCaprio, es un ejemplo más allá del artista, pero como actor me encanta. Músicos me gustan mucho los italianos, por supuesto, Giovanni Caccamo, Tiziano Ferro, entre otros.
-¿Pensás en desarrollar las dos carreras en paralelo?
-Ahora la prioridad es la música y si llegaran a aparecer cosas interesantes para hacer desde lo actoral lo haría mientras pueda compaginarse con el proyecto principal de componer, armar giras, y conectar con el público desde mi música. Componer lleva tiempo y le
quiero dedicar el espacio que se merece.
-¿El desafío es ganarte a otro público, más allá de la generación Z?
-Es salir de la lógica del mundo de la música hoy, que es “one hit wonder” y listo. Una sola canción que la pega, pero no se profundiza en un disco, en un artista… Ojalá que eso sí pase conmmigo. Mi deseo profundo es que la gente me conozca a través de mis canciones.
-Decís que sos romántico. ¿Cómo empezó esa historia de amor con nuestra Cande Molfese?
-Como un amor de una gira, un beso que le pedí el día de mi cumpleaños estando lejos de todos los míos, después del festejo con el elenco, pero ocurrió que nos enamoramos profundamente y acá estamos. Cande me abrió mucho los ojos, me hizo ser mejor hombre,
mejor persona, la admiro además, como artista. Juntos nos divertimos mucho, somos los dos un poco aparatos para mil cosas y nos reímos de nosotros mismos. Tengo mil anécdotas con ella, siempre es un plan para mí estar juntos.
-De hecho, tus seguidores también se deben a un canal de YouTube, Ruggelaria, donde hacen una suerte de serie web sobre su vida real como pareja, ¿verdad?
-Exacto, convivimos hace 4 años y medio y el canal nació con la relación prácticamente.
-¿Y cómo la lleva una pareja tan internacional cuando no se ven?
-Tenemos base en Argentina por ahora, pero ella estaría dispuesta a vivir en Italia o donde fuera, vamos desarrollando nuestras carreras y tratando de coordinar todo. Mientras el otro está de gira, mucho Facetime, pero también viaje relámpago, en toda semanita libre,
ir a encontrarse, porque a eso no lo reemplaza la pantalla.
-Tienen fama de románticos y apasionados los italianos…
-Totalmente. Una de las anécdotas es que una vez perdimos el avión por estar a los arrumacos y besos. Soy una persona cariñosa y cuido a mi amor. Y aunque es pronto, me veo papá joven con ella. No es el momento de la carrera de ninguno, pero cuando todo se estabilice,
seguramente pasará.

Dos booms digitales al unísono
Danna Paola, la actriz, modelo y cantante mexicana que fue
sensación en la serie Élite de Netflix, es la protagonista del
video Probablemente, el primer sencillo de Ruggero Pasquarelli.
Por eso, cuando estos dos femómenos virtuales se juntaron, las cifras explotaron por el aire. “Pensé directamente en ella, nunca consideré a otra y ella, sin conocerme, escuchó la canción y aceptó. Vibramos en una sintonía parecida desde el inicio. El rodaje del clip fue excelente, divertido, dinámico. Yo tampoco la conocía. Es encantadora y fue fácil al ser los dos actores de pronto saludarnos y
al minuto actuar como novios de hace años. Fue muy profesional y ella una sensación a donde va“.