Luz

Se sabe que el calor puede estropear en segundos el maquillaje más cuidado. Por años las mujeres intentamos mantenernos intactas bajo los rayos del sol. Los esfuerzos fueron en vano. La transpiración era el enemigo declarado de los cutis perfectos a fuerza de base y de ojos espléndidos logrados a puro delineador y máscara. Pero hoy la historia es otra. La industria de la cosmética hace tiempo que tomó nota de la demanda de las consumidoras. Así surgieron una serie de productos desarrollados para resistir la acción del agua que garantizan una apariencia impecable antes y después del chapuzón. Ahora pueden verse divinas en contextos tan incompatibles con el make up como la playa o la pileta.

Fórmulas poderosas
La lógica de estos productos se basa en la conocida incompatibilidad del agua con las materias grasas. Son hidrófugos, es decir que rechazan cualquier elemento acuoso. Así, los water proof fueron formulados en base a ceras y micropigmentos que se adhieren a la piel, a los labios y a las pestañas mucho más que un producto estándar, formando una micropelícula protectora. A raíz de esta excepcional adherencia, algunos argumentan que su uso habitual no es lo más indicado. Pero lo cierto es que si se los usa en forma eventual (para ir a la playa o a la pileta), se trata de productos confiables que cumplen su promesa con creces.