«Todas las semanas me hago limpiezas de cutis y en invierno elijo tratamientos como peelings y pulidos con punta de diamante. Noto mucho el cambio en mi cara: el brillo de la piel es otro, tengo los poros cerrados y luce más sana. El toque final es el protector solar. No voy a ningún lado sin él”.
RSS
G Plus
Facebook
Twitter