Lucas Bustos
El entorno, el lugar donde se nace y se crece, puede ser inspirador. Algo así le sucedió a Lucas Bustos, quien estudió y trabajó en Chile y Estados Unidos, a lo que sumó una excelente experiencia en España para, finalmente, volver a su Mendoza natal y ser profeta en su tierra, contrariando el dicho.
Hoy, a los 32 años, se lo ve seguro y bien plantado, pero alguna vez este chef fue un adolescente con dudas sobre su futuro. Luego de pasar por varios colegios, teniendo el antecedente familiar de un hermano ingeniero y otro economista y sin demasiada idea de qué hacer, sus padres le ofrecieron que estudiara en el exterior. Le gustaba cocinar y un allegado le sugirió que buscara algo vinculado a la enología.
La opción elegida fue INACAP, universidad tecnológica de Santiago de Chile. “Cuando terminás, te ofrecen opciones para seguir estudiando en otras ciudades del mundo. Yo elegí New York, donde hice training en Starwood Hotels y en el Culinary Institute of America. Además, trabajé en restaurantes.
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