Sergio González Crubellier
Chef Ejecutivo del resto Noso, Hotel W de Santiago de Chile
“Mi abuela fue cocinera toda la vida”, dice Sergio González Crubellier, que tiene 32 años y es el responsable de la carta de Noso. Mientras estudiaba economía en La Plata el chef descubrió su pasión por los sabores y comenzó a cursar materias en el Instituto Argentino de Gastronomía. Sin embargo, confiesa que mucho de lo quen sabe lo aprendió de la mano de Jean Paul Bondoux en La Bourgogne, del Alvear Palace Hotel. Justamente fue su maestro quien lo convocó al W Hotel en el barrio Las Condes de la capital chilena. “No se hacer asado”, bromea el joven oriundo de Chascomús luego de aclarar que lo suyo es la cocina francesa cuyas técnicas aplica a productos autóctonos. “El 80 por ciento de la propuesta es productos de mar. Tuve que aprender mucho porque había sabores y texturas que no conocía cuando llegué”, explica.
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