Bautizada AneVivo por la compañía suiza que lo desarrolló (Anecova), el método consiste en la introducción de óvulos y espermatozoides en un dispositivo intrauterino y poroso, con lo cual el embrión se fecunda y desarrolla en su hábitat natural, con esas mismas condiciones de luz, temperatura y nutrientes. “Es sin duda un proceso mucho más fisiológico y natural”, señala el Dr. Fernando Neuspiller, director de IVI Argentina.
RSS
G Plus
Facebook
Twitter