“La obra feminista que revoluciona el off”. Así describieron muchos a La patada del camello, pieza que a mediados de 2018 marcó el debut de Sandra Criolani como dramaturga y que en su primera temporada en cartel disfrutó como pocas de las mieles de un gran boca en boca. La obra vuelve el 9 marzo, en la misma sala (El Método Kairós) y con ella nuevamente al frente del elenco (junto a Sofía González –la otra autora de la pieza- y Federico Ferreyra). “Yo creo que es un obra muy femenina, escrita por mujeres y sobre mujeres, y también es feminista, no desde un punto de vista combativo sino desde un lugar más bien sensible, que busca destacar el poder y lugar de la mujer en la sociedad. Se trata, en primer lugar, de un encuentro fortuito entre dos mujeres, muy diferentes entre sí, que pertenecen a mundos casi opuestos. No quiero arruinar el factor sorpresa pero lo que encuentran juntas habla mucho de la historia de ambas y de este momento actual”, comenta.
Nacida en Oncativo, Córdoba, la actriz asegura que su mirada siempre fue más inclusiva que sectaria. “Hablamos del aborto, sí, pero no buscamos imponer ninguna mirada, sólo quisimos mostrar un punto de vista tan honesto como válido. La prueba está en que muchas veces tuvimos a chicas de pañuelo azul en la platea. Y al finalizar algunas nos dijeron lo más lindo que se puede escuchar de parte de un espectador: ‘nos hicieron pensar’”, asegura. Luciano Cáceres, Leo Sbaraglia y Augusto Fernandes (su gran maestro) fueron algunas de las personalidades del medio que vieron la obra en alguna de sus agotadas funciones. “La visita de Augusto fue muy emotiva, en sus talleres nos formamos y nos conocimos con Sofía y verlo ahí fue impagable. Poco después de esa función, falleció”, recuerda con un dejo de amargura.
En febrero, la actriz se mostrará además en la pantalla grande gracias a El Kiosco, comedia costumbrista en la que será Ana, mujer de Mariano (interpretado nada menos que por Pablo Echarri). “Narra la historia una familia que un buen día decide patear el tablero y ponerse un kiosco. A mí me toca ser la voz de discordancia, la más escéptica y reacia al cambio”, adelanta. Entusiasmada por un 2019 muy auspicioso, Sandra deja una reflexión final: “Los actores solemos nadar en un mar de incertidumbres e inseguridades. Con la obra descubrí lo importante que es la autogestión, la búsqueda de espacios e historias propias. Hay que animarse a dar el salto, hay que intentar vehiculizar toda la energía que tenemos como intérpretes y artistas hacia la creación”, afirma.
BIO
Nació en Oncativo, Córdoba, provincia en la que se graduó como Licenciada en Teatro. En Buenos Aires estudió actuación, danza, guión y canto. El teatro fue su primer amor, pasó por obras como Las brujas de Salem, Las mujeres de los nazis y El guardarropas. También participó en tiras como Sres. Papis (Telefe), Farsantes (El Trece) y Once (Disney Channel). En cine actuó en No te olvides de mí (junto a Leo Sbaraglia) y en la inminente El Kiosco.
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