Un aroma de la infancia nos traslada a otro tiempo y a otro lugar de manera instántanea. Ese es el gran poder que tienen los perfumes: nos hacen viajar a cualquier sitio del planeta en un segundo. Los narices más reconocidos del mundo y de Argentina se inspiran, así como lo hacen los grandes artistas, con destinos, con lugares que los cautivaron o en los que encontraron una nota o un acorde que los sorprendió. Ese es el puntapié inicial para crear varias de las fragancias más exitosas del mercado. Algunas tienen el nombre de la ciudad en su denominación, en cambio otras el frasco, los colores elegidos y los spots publicitarios (¡así como las notas, claro!) son los encargados de llevarnos a otro rincón del planeta.
Costa Amalfitana
Un mar color aguamarina, acantilados con vistas de ensueño y pueblitos milenarios con pequeñas callecitas empedradas. Así es la costa más glamorosa de Italia en la que Tom Ford se inspiró para crear su Eau de Parfum masculino Nerolí Portofino de la línea Private Blend. Para la botella se eligió un celeste vibrante -parecido al mar-, en tanto para su jugo se eligieron notas de cítricas de mandarina, pomelo y naranja -típicas de la rivera- y el toque floral llega de la mano del jazmín y el nerolí.
Cadaqués
Esta ciudad de la Costa Brava sorprende por sus construcciones bien blancas y su mar azulado. Este lugar español fue fuente de inspiración y lugar de residencia del gran artista Salvador Dalí. Sunrise in Cadaqués es la fragancia masculina que reinterpreta perfectamente este paisaje. ¿Cómo? Con acordes florales y orientales como la mandarina, la pimienta rosa, el jazmín, el patchouli y, como touch único, con bálsamo de Perú.
Los Ángeles
Luego de 20 años sin lanzar una fragancia femenina la casa Dior decidió alejarse del glam de Francia y elegir la ciudad las estrellas de Hollywood para crear su perfume Joy. En la búsqueda de un espíritu bien moderno convocaron a la actriz Jennifer Lawrence, quien en el spot publicitario se muestra en una mansión con vista a toda la ciudad. La fragancia, creada por el nez Francoise Demachy, busca representar el significado de la felicidad con notas de bergamota, rosa de Grasse, jazmín y sándalo.
Costa Británica
Indigo de llama la reversión del perfume masculino Mr. Burberry que tiene como embajador al inglés Josh Whitehouse. La campaña se llevó a cabo en las costa inglesa, lugar donde el perfumista Francis Kurkdjian se inspiró para crearla. Las hojas de violeta, la menta, el limón y el romero se suman al aroma del musgo -típico de esta costa húmera y gris- para lograr un perfume fresco, cautivante y con gran personalidad, como ese paisaje en donde rompen las olas contra las piedras y el verde se fusiona con el marrón creando un fresco dramático y hermoso.
París
La Ciudad Luz fue sitio de inspiración para millones de artistas y creadores. Esta vez, la París moderna es la que cautivó a la casa Yves Saint Laurent para presentar el Eau de toilette Mon Paris. La elección de los colores rosados y el brillo conjugan lo sofisticado con lo vanguardista de la capital francesa. Bien frutal, el jugo combina acordes de peonía, flor de azahar y jazmín chino con patchouli de Indonesia y vainilla de Madagascar.
Moscú
La señorita francesa de Le petit robe Noir de Guerlain siempre recorre el mundo. Tras pasar por París, Venecia y Nueva York llega con su versión Intense a Moscú. En la capital rusa se enfrenta a las inclemencias del tiempo y encanta a los oficiales que circundan la Plaza Roja con notas golosas y bien adictivas, como los acordes de algodón de azúcar, vainilla y rosa de Bulgaria.
Roma
Una joya nocturna de Bvlgari. Eso es lo que representa esta última fragancia femenina de la marca italiana llamada Goldea The Roman Night. El prestigioso maestro nariz Alberto Morillas creó un perfume que enaltece el aroma del jazmín y el nardo. A esta explosiva fusión se le suma suculenta mora, jazmín amante de la noche, vetiver y peonía negra.
Marruecos
Este país del norte de Ágrica llama la atención por sus mercados, sus dunas y los aromas intensos de sus especies y tés. Así fue como Martha Harff se inspiró para crear la versión femenina de Morocco, que combina rosa, magnolia y durazno. Además, y bien de la región, le añadió ámbar, pimienta rosa y toronja. El perfume tiene también su versión masculina llamada Lui.
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