Luz

Luciano Eguiazu y
Santiago Mannella
Chefs de Adorado

El rojo carmín de la fachada invita a descubrir la pasión por la comida casera. Adorado propone un espacio para esos breaks cotidianos: desayunos, cafecitos, almuerzos y tés a deshora. Su estética pulcra, combinada con las pizarras, rememoran los rincones de Shoreditch, el vanguardista barrio de los suburbios londinenses.Platos sabrosos, hechos con productos del día maridan con limonadas y pomeladas, el fuerte del lugar. El chef neuquino Luciano Eguiazu, prepara los panes caseros, budines y muffins que aprendió en su paso por el IAG (Instituto Argentino de Gastronomía), donde se desarrolló profesionalmente en el área de pastelería, panadería y en el curso Almacén de antojos. Santiago Mannella, su partner, aporta la experiencia de Lo de Moni, un restó a puertas cerradas que alguna vez tuvo en el barrio de Villa Crespo.