Del tono más pálido a la versión más vibrante, el rosa se impone como color de la temporada. Si es claro, hace referencia al a inocencia; si es fuerte -tipo chicle- imprime al outfit un tono más lúdico y al llegar al fucsia es perfecto para llamar la atención y seducir. Así de versatil es el color asociado tradicionalmente a las niñas que hoy ocupa un lugar de privilegio, ni más ni menos que, en el guardarropa de Gigi Hadid, la modelo estadounidense que -a los 22- es un referente de la moda mundial. Esta paleta Barbie Style parece ser un fetiche para la top que lució tailleurs en toda la gama a lo largo del año. En su caso, siempre se trata de diseños de vanguardia que combina con accesorios poco llamativos al tono o en colores opuestos.
Pantalones al tobillo con blazers extra large; Oxfords con chaquetas cortas, palazzos con sacones y pitillos con tops engomados son algunas de las opciones que plantea la top. Le da igual que sea de día o de noche, para ella el rosa es tan versátil que admite infinitas opciones. De hecho, es el color que eligió para la edición limitada de zapatillas Reebok con su firma y el que usa en muchas de las tomas de Victoria’s Secret, staff del que forma parte (aunque no será de la partida en el pasado show de Shangai debido a que China no le dio la visa para visitar el país). Cocó Chanel fue quizás la precursora, junto con Dior en imponer este color como un obligado. Pero en los últimos meses copó las pasarelas más diversas: desde firmas deportivas hasta etiquetas haute couture como Nina Ricci o Emporio Armani. Aunque algunas tribus urbanas se nieguen a incorporarlo, va a ser dificil erradicarlo del vestuario. Más aún si las it girls lo siguen usando y hacen de él un color de culto. <
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