Se llama Yes, I Do y en esta entrevista la diseñadora argentina de alta costura nos cuenta en qué se inspiró y cuáles son sus secretos a la hora de vestir a una mujer para un momento tan especial. Además, habla de sus inicios, la pandemia y el futuro.

Claudia Arce es, sin dudas, una de las grandes diseñadoras argentinas de alta costura y hoy, en plena cuarentena por la pandemia de coronavirus, charla con Luz desde su casa para contarnos que está presentando su colección de Novias 2020 a la que llamó Yes, I Do. Y otras novedades.

Es que el amor se celebra todo el tiempo, y Claudia nos dice que esta colección fue inspirada precisamente en ese sentimiento maravilloso y eterno.

Claudia Arce refleja en cada uno de los diseños realizados para Yes I Do la pasión y el amor por su trabajo. En ella, gasas de seda natural, encajes, guipures, tules, brocatos y bordados realizados a mano envuelven figuras femeninas para cada estilo de mujer.

«Podemos diseñar el vestido más suntuoso pero si la persona no se siente cómoda, no lo lucirá»

En su tendencia, son protagonistas las espaldas con escotes pronunciados que se adaptan perfectamente en vestidos imperiales, sirena y de líneas lánguidas.

El blanco off white, natural, nude y rosados empolvados son los preferidos de  esta colección como así también la fusión de materiales en oro viejo y plata, para reflejar un look vintage.

Un amplio abanico de posibilidades para todas las novias y quinceañeras que eligen a Claudia Arce para ese día tan especial con la garantía de lucir como reinas.

“Desde niña me crié rodeada de todo lo vinculado a la moda ya que mi madre cocía para varias de sus amigas y clientas”, comienza a contarnos Claudia sobre sus comienzos. Y agrega:

“Ella me enseñó todo lo que tenía que saber sobre costura, luego fui haciendo diferentes cursos  en academias ya que cuando yo comencé no estaba la carrera de diseño en nuestro país. Realicé mis primeras colecciones a los 19 años y a los 25 ya tenía tres negocios de venta mayorista de línea casual”.

Claudia comenzó haciendo prêt-à-porter y de allí pasó a la alta costura. Y entre una y otra etapa de su pasión por el diseño hubo un momento bisagra que vino de la mano de la economía argentina.

«Después de varios años de lidiar con la situación económica del país quebré y tuve que cerrar mis negocios. Cuando reanudé mis actividades comencé con alta costura, algo que me apasionaba. Abrí mi negocio en Recoleta y presenté mis primeras colecciones de esta línea con mucho éxito. Y a pesar de ello, la crisis del 2001 me hizo tomar otro rumbo”, cuenta Arce, quien entonces decidió viajar…

“Fui a Italia en busca de otras oportunidades y aunque recibí propuestas de trabajo en los atelieres de Roberto Cavalli y Valentino , dos de los diseñadores que más admiraba, decidí continuar en mi país, ya que me pedían vivir en el lugar y eso significaba mudar a la familia y dejar mi negocio y mi equipo de trabajo”, recuerda.

“El incentivo de que elogiaran mi trabajo importantes firmas hizo que preparara una colección y viajara a Estados Unidos. Pude vender mis colecciones a locales multimarcas de renombre. Y tuve el honor de que grandes celebridades internacionales compraran mis diseños, como Salma Hayek, Anna Kournikova, Paris Hilton, Ana Obregón , Rosario Flores, Paty Manterola, entre otras», agrega quien, así, reabrió su boutique porteña en Recoleta.

“Fue un gran momento, reabrí mi boutique sobre la Avenida Callao e instalé mi maravilloso atelier en un piso sobre la misma avenida. Quise que mis clientas y novias tuvieran un lugar exclusivo, único, con mucho estilo y glamour para recibirlas y diseñarles en un ambiente relajado”. 

-¿Dónde encontrás inspiración para crear?

–Mi inspiración surge en todo momento, trato de alimentar mi mente con cosas lindas. Viajo mucho por mi trabajo y cada lugar me inspira, sus costumbres, colores, paisajes. El trabajo de las telas, los bordados y la calidad de los materiales me llevan a realizar prendas únicas, quiero lo mejor para mis clientas. 

-¿Cómo ves la moda actual en la Argentina?

–La moda en la Argentina crece constantemente con nuevos valores, pero la alta costura requiere de años de trabajo, y noto, por la cantidad de pasantes, que deberían capacitarlos más en esta rama de la moda. Muchas veces nos encontramos con dificultad para contratar personal para nuestro equipo por la falta de conocimiento. Las manos maestras se van perdiendo y los diseñadores ya consagrados muchas veces no tenemos el tiempo de enseñar.

-¿Cómo es elegir el mejor estilo, género, corte para cada clienta?

–Cuando una clienta me elige, siempre trato de tener en la primera entrevista una charla para conocerla y a partir de eso poder comenzar con el diseño, es muy importante para mi establecer una relación amena para sugerir y plasmar en un boceto el vestido que llevará para un día tan especial, sea cual fuera ese evento. Me encanta que cada una se sienta cómoda y segura. La elegancia se ve y se expresa a través de la seguridad en uno mismo. Podemos diseñar el vestido más suntuoso pero si la persona no se siente cómoda, no lo lucirá. 

-¿Seguís las tendencias o te dejás llevar por tu intuición?

–No soy de seguir las tendencias, solo, claro, si me lo piden. Pero, para mis colecciones reflejo lo que me inspiró en su momento. Un diseñador marca su estilo cuando es auténtico.

Claudia dice que es “muy clásica en la paleta de colores”. Para las novias y quinceañeras, por ejemplo, le enamoran el off white, nude, natural y los rosados suaves en todas sus variantes.

“La alta costura es costosa y yo pretendo que mis diseños perduren en el tiempo y puedan volver a usarse”

“Para madrinas e invitadas, los colores empolvados me parecen sofisticados y no pasan de moda nunca”, agrega. Y en cuanto a los más estridentes, los toma en cuenta “si me los piden y considero que les quedan bien”.

Como ella bien lo aclara, “la alta costura es costosa y yo pretendo que mis diseños perduren en el tiempo y puedan volver a usarse”.

Más allá de ser experta en ropa de noche y alta costura, Claudia tiene una gran noticia. Y es que a pedido de sus clientas, planea sumar su línea de prêt-à-porter, que «seguramente se haga realidad en la próxima temporada».

“La apertura de mi atelier me da la posibilidad de incorporar otra línea , ya que tenemos la comodidad para llevarlo a cabo, como así también tengo pensado incorporar calzado, trajes de baño y accesorios. Mi lugar tiene todo lo que imaginé, espacio, comodidad, estilo, y sobre todo una energía muy especial. Será por que está lleno de mucho amor”, agrega Claudia.

Es imposibe seguir la charla sin caer en el tema que nos toca a todos a nivel mundial. Y de ello habla Claudia desde su casa en esta nota.

«Nunca tenemos que bajar los brazos, vinimos a cumplir objetivos en la vida. Es obvio que no llega quien se detiene”

“La pandemia me sorprendió y me afectó como a todo el mundo. Siento desconcierto, angustia, preocupación, ya que nuestro rubro será uno de los últimos en restablecerse. También me permitió ver y entender que no tenemos nada asegurado y que debemos priorizar cosas dentro nuestras posibilidades”, explica la diseñadora. Y agrega:

“Por un tiempo quedé anestesiada ante la situación y a medida de que pasan los días, por suerte, no perdí las esperanzas de seguir proyectando. Vivo en un país que me tiene acostumbrada a los sobresaltos. Hace un par de años perdí a mi marido, por un cáncer, y a pesar del profundo dolor que no podré superar sigo en pie, porque considero que nunca tenemos que bajar los brazos, vinimos a cumplir objetivos en la vida. Es obvio que no llega quien se detiene”, dice dejando un gran mensaje.

“Por suerte, he tenido varias entrevistas vía online con clientas del interior para futuros casamientos y ya tenemos varias reservas de turnos”, agrega antes de darnos su visión sobre lo que vendrá. 

“Seguramente, habrá un antes y después de lo que nos tocó vivir. Pienso que hasta que no se encuentre la vacuna seguiremos cuidándonos. Y luego volveremos a las mismas costumbres pero con un mensaje latente que nos mantendrá más alerta. Esperemos que no tengamos que volver a vivir esto, y si volviera que nos encuentre más preparados en todos los aspectos. Por lo pronto, cuando reanudemos nuestras actividades, llevaremos a cabo todo el protocolo que es necesario para el cuidado de nuestro equipo como también para nuestras clientas”.

-¿Cómo te imaginas la vuelta a las fiestas, celebraciones y eventos?

–Creo que será maravilloso, más potenciados que nunca, porque tenemos la necesidad  de expresar lo que contuvimos en este tiempo. Somos totalmente afectivos, nos encanta divertirnos,salir, compartir momentos, abrazar a nuestros seres queridos. Tendremos una Argentina con sus idas y vueltas, pero no podemos negar que tenemos un espíritu alegre. 

Para terminar, y ante la pregunta sobre cuáles son sus metas en la moda, Claudia nos regala un resumen que justifica por qué no puede pedir más:

“Tengo 36 años dedicados a esta profesión con mucho amor, me siento realizada profesionalmente. Presenté mis colecciones en diferentes partes del mundo, viajé y conocí lugares maravillosos. Vestí a celebridades nacionales e internacionales, tengo mi local y mi atelier en Recoleta, uno de los barrios más lindos de Buenos Aires”, comienza a enumerar. Y continúa:

“Hace un año fui elegida como diseñadora exclusiva internacional para el departamento de bodas de una de las cadenas hoteleras más lujosas del mundo, los Grand Velas Resort , para Grand Velas Riviera Maya, Los Cabos y Nayarit de México. Cada uno de sus departamento de bodas lucen diseños de mi colección de novias Yes, I Do, y es la primera vez que un hotel de lujo cuenta con un diseñador exclusivo para sus clientas. Todo un honor para mí que se fijaran en mi trabajo. Y aunque muchos no conocen mis logros internacionales, porque he mantenido un perfil bajo en mi profesión, me siento orgullosa de representar a mi país”.

«Me siento consagrada en muchos aspectos, tengo una familia maravillosa que me acompaña en cada momento», agrega antes de explicar su empresa familiar.

«Mi madre sigue siendo directora de mi atelier capacitando a los nuevos que se suman. Mi hija Nadia y mi yerno están dedicados profesionalmente a la fotografía y son responsables de las campañas de mi firma con Positiv Estudio y Pogo Eventos, y mi hijo Maximiliano es DJ, productor de música y junto a mi nuera tienen su empresa de social media que se llama Stick y se encargan de la imagen y el contenido de mis redes sociales. Y Celina, la más chica, es encargada general de la empresa. Tengo un gran equipo de trabajo y todos me acompañan incondicionalmente«.

«No puedo pedir más, solo que que esto termine pronto para retomar nuestras actividades. Seguir trabajando en lo que me apasiona y hacer que las mujeres que me eligen, se sientan reinas«.

Fotos: Gentileza Claudia Arce (@claudiarceok)